domingo, junio 25, 2006

Saturno


Sábado juntos. Vimos cómo los chicos jugaban a mamá y papá en el departamento donde los dejaron sólos por un rato y en una lengua que para el resto era de otro planeta. Faltan todavía años luz, pensamos, para que sea verdad. Pero al menos ya no se aburren. De a poco fueron perdiendo el miedo a la oscuridad de la casa sola, abandonada a ellos.
Tengo tu anillo, amor, entre mis monedas, como si fuera una más. La memoria de la cuña en la plata dice 17/01/97 junto a mi nombre. Ya no me acuerdo por qué el mío no existe. O mejor dicho ya no importa, como tantas otras cosas.
Hoy, que tenemos los astros cruzados en el mismo lugar, queremos creer en otro par.

No hay comentarios.: