viernes, agosto 22, 2008

Sol solecito caliéntame un poquito por hoy por mañana por toda la semana


Lo que me gusta del pibito que le rinde culto a Pókemon es esa escritura tan de mente desnuda, sin puntuaciones, como para que el ejercicio de respiración del texto sea hecho por el que lo lee, y a su vez por la lengua misma, en la acepción saussuriana de tesoro colectivo. En este sentido también los textos se dicen (se cantan) sólos, con esa naturalidad. Se respiran de memoria (de corazón) como viejas canciones infantiles, como puro oxígeno entre los árboles de una plaza, como se camina la vereda de la cuadra propia ...

y sin embargo... cada fotopoema es consciente de que pare nuevas pequeñas tradiciones, nuevas pautas tribales, nuevas posteridades...

Pasen y exhalen:

este es mi mundo y este punto es mi país : un crack.



1 comentario:

valeria meiller dijo...

tus textos siempre son hermosos. besos.