* Desvergonzada y aún pudorosa. Aterradoramente despiadada. La santa. La buena. La mala. La más linda. La maga. La triste. La introspectiva. La dramática. La descocada. La caprichosa. La colegiala. La enamorada. Cazadora de mariposas en la pantalla del video game. La obra es un espejo mágico en donde se mira quien te mira; una colección de historias en lápiz y mouse o aguja de bordar, que oculta y revela simultáneamente. Es en la suma de fisuras, en la hendidura, donde el sujeto aparece como cierto. Su naturaleza es performática. Lenguaje y narrativa se diluyen. Una presencia única nace, de tanto colarse sus facetas hiperbolizadas, unas en otras. (la diosa y todas las diosas. Y todas las caras de la misma diosa).
Flavia Da Rin: Devota ante todo del amor, de sus amigos, de sus amores, de sus maestros, de sus elecciones. Esa misma devoción que en su intensidad, es capaz de solidificar afirmaciones hasta volverlas universales como la misma risa (o la tos).
Mañana visito uno de sus templos nómades ¿volveré extasiada? ????
2 comentarios:
volviste extasiada?
yo fui a ver a las niñas de flavia
hace un par de semanas ya...
me divierte su mundo.
no pude, cerraba antes de que yo madrugara :(
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